Mousse cremosa de Chocolate negro

La mousse de chocolate tiene su origen en Francia y consiste en un postre cuya base es la clara de huevo montada a punto de nieve, que es lo que le da la textura “espumosa”.

Es importante tener en cuenta que las mousses caseras se basan en huevo crudo (debéis de usar huevos muy frescos), con lo que hay que tener precaución de consumirla pronto, y mantenerla refrigerada, sobre todo en verano.

La mousse de chocolate siempre es una buena elección como postre, y podéis prepararlo con los peques de la casa.

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Mousse Cremosa de Chocolate Negro


Ingredientes para 8 vasitos:

170 gr. de chocolate negro
55 gr. de mantequilla
160 ml. de nata líquida 35% M.T.
4 huevos M
100 gr. de azúcar


Nota: Todos los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente.

Elaboración:

1. Separamos las yemas de las claras en cuencos diferentes y reservamos.
2. Ponemos en un recipiente al baño maría, el chocolate troceado.
3. Cuando comience a fundirse, añadimos la mantequilla y después de que se derrita ésta, incorporamos la nata y vamos removiendo.
4. Cuando esté todo bien mezclado, retiramos del baño maría y dejamos que vaya enfriando.
5. Montamos las yemas un poco con unas varillas y si vemos que no está muy caliente el chocolate, las vamos incorporando poco a poco sin dejar de remover con las varillas. Reservamos.
6. En el otro cuenco con las claras las montamos a máquina, ya que es más rápido y más fácil. Al comenzar a aumentar de volumen las claras, añadimos el azúcar y dejamos montando hasta que formen picos.
7. Con una lengua de silicona, cogemos un poco de claras y las echamos al chocolate, removiendo con la misma lengua.
8. Echamos el chocolate encima de las claras poco a poco, mezclándolo todo con movimientos suaves y envolventes para que no se baje la mezcla.

9. Con una manga pastelera, cerramos la parte más estrecha ayudándonos de una pinza, rellenamos por la parte más ancha teniendo cuidado de no llenarla entera y repartimos en cuencos, vasitos o en los recipientes que nosotros deseemos. Esto hará que sea más limpio y fácil el reparto de la mousse.
10. Reservamos en el frigorífico durante 24 horas.







Podemos terminar decorando con nata montada, chocolate rallado, grosellas, o con hojas de menta.
Un postre que los amantes del chocolate no deben perderse. 

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